El análisis de fluorescencia de rayos X o simplemente análisis XRF es un método no destructivo que los científicos utilizan para determinar la composición de los materiales, qué elementos forman ciertos materiales. Es menos arbitrario en lo que respecta al hecho de que nos permite, con la ciencia de nuestro lado, aprender más sobre diferentes sustancias. ¿Qué son las máquinas XRF y cómo utilizan la radiación química dañina conocida como rayos X? Esta radiación, cuando incide en una muestra (o material), hace que los átomos; o pequeñas partes de la sustancia, se exciten. Cuando los átomos se excitan, liberan su energía en forma de rayos X fluorescentes. Estos rayos X son capturados y analizados por la máquina para determinar qué elementos están presentes en la muestra. De esta manera, los científicos obtienen información sobre la composición química de estos materiales.
El ejemplo más utilizado y real de análisis XRF. Por ejemplo, la minería es el proceso de extracción de minerales del interior de entornos naturales para el uso humano. La industria farmacéutica, que sintetiza medicamentos, utiliza esto para corroborar que las sustancias son apropiadas en sus características. Además, los científicos ambientales utilizan XRF en muestras de suelo y agua para identificar contaminaciones o elementos que son dañinos para el medio ambiente. ¿Cómo analizar mejor el elemento en el acero o mineral que se analiza, lo que se puede ver al saber de qué está compuesto un material complejo? Los científicos tendrán la capacidad, con equipos refinados como las unidades desarrolladas por Nanyang JZJ, de saber el resultado final exactamente en solo unos minutos. Les permite analizar una gran cantidad de muestras con relativa facilidad, lo cual es importante dadas sus profesiones.
Una de las mayores ventajas de utilizar el análisis XRF es que no destruye ni altera la muestra. A esto se le denomina prueba no destructiva. La naturaleza no destructiva del análisis significa que las muestras de prueba no se modifican ni alteran durante la prueba y se pueden guardar para un nuevo análisis en una fecha posterior. Especialmente cuando se trata de recursos que son limitados o costosos y no se desea que se filtren. Además de eso, el análisis XRF también es rápido y extremadamente preciso. Estas muestras requieren un pretratamiento mínimo para garantizar que los científicos puedan generar resultados rápidamente. En cambio, les permitirá a los investigadores concentrarse en el descubrimiento en la segunda mitad de su vida: estudiar e interpretar los resultados.
Dicho esto, el análisis XRF no está exento de limitaciones. Una de las principales limitaciones es la profundidad de penetración de los rayos X en una muestra. Tenemos que poder ver los átomos en el interior, por lo que es necesario ser transparente para los rayos X. En el caso de muestras más gruesas o más densas, esto restringe los datos que se pueden extraer de las muestras más profundas. Además, el análisis XRF es realmente adecuado únicamente para elementos pesados (carbono/hidrógeno/nitrógeno). Estos son omnipresentes en la mayoría de los materiales, pero problemáticos para una máquina XRF. La última parte, pero no menos importante, del análisis XRF exige una base de conocimientos técnicos. El funcionamiento correcto de la máquina y la lectura de sus resultados requieren una formación específica.
En los últimos años se han producido una serie de avances e innovaciones apasionantes en el campo de la fluorescencia de rayos X. Las máquinas de XRF se han mejorado con el paso de los años para que sean más precisas, fiables y rápidas que en el pasado. Por ejemplo, un analizador XRF automatizado Nanyang JZJ que incorpora tecnología moderna con un detector de alto rendimiento para buscar los elementos en concentraciones muy bajas en cada muestra. Los científicos pueden lograr un nivel de detalle tan fino que incluso los materiales más complejos (que normalmente resisten las pruebas) dan resultados. Además, estos avances han sido fundamentales en las investigaciones sobre una serie de muestras, y los investigadores han aportado información sobre la composición de las muestras que antes era difícil de obtener.